lunes, 14 de marzo de 2011

El terror tiene nombre: Tsunami

Aunque este sea un blog con un claro carácter deportivo, la noticia del fin de semana es sin duda esta, y creo que concienciar a la gente de lo ocurrido en Japón es lo mas humano que puedo hacer.


A las 05:45 del 11 de marzo (14:45 hora local), un terremoto de  de 7,9 grados (que posteriormente fue subido a 8,9) Sacudió Japón durante dos largos e intensos minutos, provocando resultados catastróficos.

Los daños del temblor sísmico no se hicieron esperar. El centro de Tsunamis Japonés, alertó de un maremoto con olas de 10m de altura.

El temblor, que se detecto a unos 280km de la capital, Tokio, no tardo en llegar y con él sus devastadores efectos.

Toda la costa nipona del pacífico se vio afectada por un tsunami con olas de 0,5m a 4m.

Innumerables familias se vieron desalojadas a lo largo de la costa, perdiendo por el camino la mayoría de sus pertenecías, así como  sus casas o negocios.

El agua, otrora fuente de vida, resultó ser en Japón causante de más de un centenar de muertos, y otros tantos desaparecidos.

Y es que aunque los servicios de vigilancia del pacífico dieran la voz de alarma, fue inútil. Coordinar un escape masivo de centenares de millares a gran escala en solo cuestión de minutos es imposible, y la “Gran ola” no atiende de urgencias.

Se desplaza a mas de 800km/h y cuanta más profundidad y presión más velocidad, pudiendo llegar a superar los 1000km/h. Háganse una idea de lo que puede tardar en llegar a una costa que está a menos de 300km una ola de 30 metros de altura….da miedo solo pensarlo.


Mucha gente se vio pillada por sorpresa y lo perdió todo…aunque consiguieron salvar la vida. Otros, no tuvieron tanta suerte y la ola se los llevo junto con montones de escombros.

El resultado fue terrorífico, pues cuando la ola se retiró por fin al mar, la costa este de Japón había quedado arrasada por completo.

Aquí les dejo una foto de un satélite de la N.A.S.A para que comprueben como la línea costera nipona, se vio recortada por el Tsunami, que arrasó con ella y se llevo parte mar a dentro.

Los daños materiales, son un agravio, pero reponer para el gobierno los daños económicos, no es un problema menor.

Se calculan pérdidas por encima de los 170.000. Millones de euros. La banca de Japón, de desploma cada día con una caída comprendida entre en 6 y el 3%. Y son varias las Multinacionales que cerraron sus fábricas para llevarlas a otro lugar, entre ellas, la famosa SONY, que cierra 6 de sus empresas.


Mucho trabajo de recuperación queda en Japón, pero eso es solo un problema y siendo sinceros, puede que el menor de los problemas.





El terremoto, provocó tan bien una serie de pérdidas millonarias, y lo que es peor, un accidente nuclear.


La central de Fukushima no soportó la potente sacudida y sus reactores empezaron a fundirse.

De los 6 reactores que componen el complejo nuclear, el 4, 5 y 6 estaban apagados por una inspección técnica. Los otros 3 se apagaron justo después del temblor.

Al apagarse la planta se tiene que poner en marcha el programa auxiliar, debido a que la alta temperatura de trabajo de los reactores, pudiera provocar una fusión de las paredes de este, expulsando a la atmosfera radioactividad.


Pero por culpa del Tsunami el programa auxiliar tan bien falló y gracias a la rápida capacidad acción/reacción  de los japoneses no provocó un desastre mayor que el de Chernóbil.

Ahora la planta está semi-controlada pues ya no es un riesgo máximo la refrigeración de esta, si no la explosiones en los reactores que pueden provocar una catástrofe nuclear.


Esto reabre el debate de si debemos seguir con el avance de la tecnología nuclear, en vez de procurar avanzar en los campos de las energías limpias y sobre todo, tratar de conseguir más seguridad en las centrales nucleares.

De momento, en todo el mundo se están llevando a cabo reuniones de los mandatarios para tratar un tema que tiene un futuro incierto.

Merkel suspende el plan para alargar la vida a las centrales nucleares alemanas, hay debate sobre la energía atómica en Chile y en Francia se pide un referéndum  sobre sus centrales.

El terremoto, en cierto modo no fue el problema,  fueron sus consecuencias las que provocaron esta situación de caos generalizado en torno a la energía atómica.

El Tsunami tan bien se encargó de destrozar aun más un país que vive tiempos aciagos y difíciles.



Desde aquí, y sin poder hacer mucho mas, mando un sentido pésame a todos aquellos que directa o indirectamente fueron afectados por uno de los mayores cataclismos ecológicos de la historia.

Andoni Etxizarreta.

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